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martes, 23 de diciembre de 2014

Relato Corto: Para Siempre #2

Continuamos con ese relato que empece hace puuuf xD JAJAJA como veis mi necesidad de escribir viene muy de vez en cuando...estoy yo como para cumplir plazos xD me muerooo!!!
Os dejo el enlace de la primera parte AQUI.
Que os guste lo que os voy a escribir ahora.


La cena comenzó bien. Gracias a los dioses, Jesús cayo en el lugar mas alejado de la mesa, por lo que la velada fue agradable. A mi lado, Sara no paraba de parlotear. ¡¡Se mudaba!! La habían destinado a Logroño, pues la empresa para la que trabajaba abría nueva sucursal allí. 
Tras la cena, comenzaron a verse copas y bailes cada vez mas desenfadados por el alcohol. Me mantengo al margen intentando charlar con todo el mundo. La copa de licor 43 con coca cola en mi mano no baja, pues apenas doy sorbos ya que yo tendré que conducir la moto de vuelta a casa y de hecho no tardare en irme pues mañana trabajo de mañana. Y hundida en esos pensamientos estoy cuando oigo una voz masculina a mi lado pronunciando mi nombre. Antes de girarme hacia él ya se quien es. Jesús. Miro su ojos y ....suspiro. 

      - Hola Alba. 

Me saluda y yo simplemente...guardo silencio. Mirándolo. Sus facciones duras y marcadas, nada tienen que ver con el muchacho que fue. Y ya es decir, porque estaba cañón antes pero ahora...¡madre mía! Por fin reacciono.

      - Hola. ¿Cómo estás? - pregunto como si nada. 

Él sonríe y juro por los dioses que me tiemblan las piernas. Sara llega en ese momento salvándome la vida. Me toma de un brazo y tira de mi diciéndome algo que no llego a entender muy bien... hasta que me veo ante... 

      - ¿Sergio? - digo sorprendida y algo incomoda ante la presencia del que fue mi compañero de clase más insoportable. 
      - Hola Alba. Estas preciosa. - sonrie mostrando toda la hilera de blancos dientes y juro que a mi casi me da un yuyu, pero de los malos. Jamas soporte a Sergio. Siempre fue un pesado y jamas me dejo en paz. La mirada que le dedico a Sara es mortal y llena de promesas de venganza.
      - Creo que ya va siendo hora de irme. Mañana trabajo. - sentencio y la cara de Sergio muta de una espectacular sonrisa de anuncio a....a....bueno...a algo. 
      -¿Ya te vas? No puedes decirlo en serio.- murmura Sergio rodeando mi cintura con un brazo.

Tomo aire y apoyo las manos en su pecho y lo empujo suavemente para apartarme. Si, es cierto que es guapo pero también es un egocéntrico petulante. Un prepotente. ¡Y un maniático! No paso un día del instituto, en el que él no me siguiera y me pidiera salir. En la ultima reunión hace 5 años no pudo venir porque estaba fuera del país pues trabaja para una empresa estadounidense. 

      - Sergio, ¿recuerdas eso que siempre te decía antaño? ¡¡Déjame en paz!! - Susurro intentando no ser brusca. Y como siempre él pasa del tema. 

Siento una mano rodearme desde atrás y separarme de Sergio. Éste, mira por encima de mi cabeza y cuando yo alzo la mirada veo el semblante serio de Jesús. ¿Pero bueno que pasa que es el juego de la noche? ¿A ver por cuantos brazos es capaz de pasar Alba antes de irse? Bufo y ahora si pataleo hasta soltarme. 

      -Pero bueno que no soy un peluche. - refunfuño y miro a ambos. 

Los dejo ahí con la palabra en la boca y voy a por Sara y unas amigas mas. Les anuncio mi partida y me despido. Camino resuelta hasta la calle y me giro a mirar el hotel. Suspiro. Voy hasta mi moto y me pongo el casco. Tras eso...disfruto conduciendo hasta casa sin dejar de darle vueltas a la noche.

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En cuanto vi como Sergio le echaba mano a Alba no lo pude remediar. Mi respuesta fue inmediata. Sobre todo al ver que ella intentaba apartarse. Lo que no esperaba es que finalmente, se largara sin mas tras sacarla de los brazos de ese prepotente. Ya la noche había perdido su encanto y sin mas me retire a mi habitación. 
Actualmente estoy en Sevilla pero...en un mes este sera mi destino. Por fin podre regresar al que siempre fue mi hogar. Si, es un pueblo. Si, esta en el campo. ¿Y? Alba esta en él. Así que en un mes, Vejer sera mi destino. Y podre conquistar a Alba. Cueste lo que cueste. Mientras tanto me toca volver mañana y celebrar la navidad con mis padres y el resto de la familia, deseando que las próximas las pueda vivir junto a ella. 
Con ese pensamiento en mente, duermo toda la noche.



Y hasta aquí chiquitines! Que tal va? Como lo veis? Ya sabéis que NO soy escritora, ni pretendo serlo. Me conformo con ser lectora (y a mucha honra!!). 
Besitos a todos. 
Atte. Emary

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